Investigaciones relacionadas han logrado concluir que el estrés acumulado del día puede ser negativo para nuestra salud.

El estrés se puede combatir igualmente con otros productos que ofrecemos desde Hidromasajes Córdoba, pero en este caso, vamos a hablarte acerca del sauna, el cual, se viene utilizando desde tiempos inmemoriales y nunca pasa de moda.

En un alto porcentaje, las enfermedades de tensión arterial (los problemas cardiacos) están relacionadas, al menos parcialmente, con el estrés. El baño térmico en un Sauna Seco nos proporciona un alivio de estrés de diversas maneras. Es un espacio cálido y silencioso, sin distracciones provenientes del exterior. Como dice la expresión, “entra en una sauna y cierra la puerta al resto del mundo”. Las altas temperaturas que nos entrega el sauna, relajan los músculos de nuestro cuerpo, estimulando la circulación, generando la liberación de endorfinas. Un Sauna Seco, no solo es agradable al uso, sino que es muy saludable para nuestro cuerpo.

Diversos estudios demuestran que el uso frecuente del sauna implica una reducción del riesgo de mortalidad por causas cardiacas. Usar el sauna entre 2 y 3 veces por semana a 60°C u 80°C reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular grave en un 27% y de 4 a 7 veces por semana reduce el riesgo en un 65%.

Con el uso regular de un Sauna Seco

Un estudio de 3 meses sobre el uso del Sauna Seco cada dos semanas mostró una reducción en la aparición de hipertensión arterial debido a su efecto relajante y desestresante. El uso prolongado del sauna y el ejercicio aeróbico frecuente, implica arterias más sanas y capaces de manejar tensiones adicionales.

Bajo el alto calor provisto por el Sauna Seco, el cuerpo libera endorfinas. Las endorfinas pueden tener un “efecto tranquilizante” suave y agradable, capaz de minimizar el dolor de la artritis y el dolor muscular de como, por ejemplo, un entrenamiento físico intenso.

Debido al calor del sauna, nuestra temperatura corporal se eleva, esto hace que los vasos sanguíneos se dilaten, lo que aumenta la circulación sanguínea. Al aumentar el flujo sanguíneo, se acelera el proceso de curación natural del cuerpo, agilizando la cura, por ejemplo, de pequeños moretones o cortes.

Después de participar en deportes físicos, podemos utilizar el calor del Sauna Seco para promover la relajación muscular, ayudándonos a reducir la tensión muscular y eliminando el ácido láctico u otras toxinas que puedan estar presentes.

El Sauna Seco cuida nuestra piel

Una persona de piel seca no tiene por qué evitar el sauna, ya que, al contrario de lo que se podría pensar, el sauna mantiene la humedad de la piel. Al entrar en el sauna, nuestra piel no pierde los hidratos tan fácilmente, como si puede suceder cuando no lo utilizamos.

Las personas que sufren enfermedades de piel como la psoriasis, la erupción cutánea y la erupción cutánea inflamada, también se benefician del uso del Sauna Seco, estimulando la capacidad de adsorción de la piel. La circulación sanguínea de la piel aumenta y comienza a sudar, eliminando las impurezas y residuos acumulados en el cuerpo.

Metabolismo

El uso regular del Sauna Seco acelera nuestro metabolismo. Esto significa que nuestro cuerpo procesa más grasa generando descenso de peso, sin embargo, este descenso, se debe en mayor parte a la sudoración y pérdida de agua, la cual se recupera al tomar agua, proceso que deberemos seguir al pie de la letra para evitar la deshidratación.

El Sauna Seco aumenta nuestro ritmo cardiaco como en el ejercicio físico

Los efectos físicos del Sauna Seco son similares a los de una caminata enérgica, aumentando el ritmo cardíaco a unos, aproximados, 120 latidos por minuto, algo similar al hacer deporte de forma moderada. Sin embargo, el uso de este no reemplaza al ejercicio y sus efectos en la salud, pero, puede ser un complemento en un estilo de vida saludable.

Se alivian la rinitis crónica y el asma

Si padecemos de una rinitis constante, podemos obtener alivio de los síntomas mediante sesiones en el Sauna Seco. Mismos beneficios podemos obtener si somos asmáticos, ya que, el baño expande los bronquios y mejora el sistema respiratorio.